Lo último sobre la limpieza de Málaga
No hace muchos años que las bombillas tradicionales pasaron a mejor vida. Son las llamadas bombillas incandescentes, cuya prohibición de fabricación comenzó el 1 de septiembre del año 2012 en todo el territorio de la Unión Europea. Probablemente hayas podido ver recientemente alguna en algún punto de venta; esto es debido a que su venta está permitida hasta el fin de existencias.
¿Conoces el porqué de esta prohibición y lo que provocaba en nuestro medio ambiente su uso?
A pesar de que ha sido uno de los inventos más importantes de toda la historia por todo lo que ha supuesto para nuestra manera de vivir, su rendimiento era bastante bajo, así como su eficiencia (15% luz, 25% energía calorífica y 60% radiación no visible).
Por tanto, se hacía más que necesario un cambio en su uso ya que, además, los materiales que se usan en su producción son altamente contaminantes, como el mercurio. Las consecuencias de su mal reciclado pueden llegar a tener efectos nocivos.
En este cambio la iluminación led (diodo emisor de luz, por sus siglas en inglés) ofrece mucha más eficiencia y rendimiento lumínico.
El funcionamiento de una bombilla led se basa en un electrón que registra una pérdida de energía al pasar de la banda de conducción a la de valencia y esta se termina manifestando en forma de fotón.
Lo más importante…¿Cuáles son sus principales ventajas? ¿En qué nos beneficia en nuestro día a día?
La versatilidad es uno de sus puntos más fuertes. Esto significa que podemos hacer uso del led en cualquier tipo de ambiente, en interior o exterior y en cualquier estancia.
Otro de sus puntos fuertes y conocidos es el bajo consumo, que a su vez repercute en un ahorro energético frente a la iluminación tradicional. De esta manera, el ahorro se verá materializado en dos aspectos: por un lado, su vida útil se alargará mucho más y por tanto su compra se verá mucho más espaciada en el tiempo, y por otro, conseguiremos una mayor iluminación a un menor coste, consiguiendo porcentajes de hasta un 80% de ahorro.
Además, podemos decir que la iluminación led es ecológica ya que, al no contar con materiales perjudiciales como el mercurio, podremos cuidar el medio ambiente desde este punto de vista también.
Como ves, el uso de la iluminación led conlleva multitud de ventajas y es nuestro deber aprovecharlas para conseguir un frenazo en la contaminación y el calentamiento global que a día de hoy son una triste realidad.
Recuerda reciclar tus bombillas en el punto limpio, ¡colabora con tu grano de arena!