Lo último sobre la limpieza de Málaga
En el Día Internacional de la Salud, recordamos a los protagonistas de este último año atípico: los sanitarios. El 7 abril de 2020 consistió en conmemorarles, puesto que, a pesar de llevar 2 semanas de confinamiento, su compromiso y entrega eran innegables. Tras pasar un año desde el comienzo de la pandemia, no podemos más que aplaudir su labor.
Este año 2021, el lema que promueve la Organización Mundial de la Salud (OMS) es Construir un mundo más justo y saludable.
Con la llegada del COVID-19, hemos aprendido a ser más conscientes del valor de la salud como aspecto primordial en nuestras vidas. Situaciones como estas suponen un punto de inflexión, valoramos más la atención sanitaria, el acceso a una sanidad pública y todo lo que gira alrededor del cuidado de nuestra salud física y mental.
Desde siempre hemos oído las recomendaciones básicas para mantener una buena salud, basada en una alimentación equilibrada y ejercicio físico regular. Pero, ¿qué más debemos tener en cuenta?
La salud no es sólo un cuerpo ejercitado o una dieta completa, la salud lo engloba todo.
La alimentación es la base, pues sirve de motor a nuestro cuerpo y mente, pero no olvidemos esta última.
El pasado año hemos vivido, a nivel global, una situación impensable que ha marcado nuestra forma de relacionarnos con el resto, pero también con nosotros mismos.
Atender a la salud mental con la misma naturalidad que la física es fundamental para nuestro bienestar. Recuérdalo y cuídala de la misma manera, teniéndola presente en tu día a día y acudiendo a profesionales cuando sea necesario.
Nuestra higiene diaria contribuye a mantenernos más preparados ante las amenazas y romper las cadenas de infección para prevenir enfermedades.
El lavado frecuente de manos ha sido clave, nos hemos lavado las manos más que nunca.
En nuestra higiene diaria pueden entrar múltiples acciones que marcan la diferencia: ducharse, usar una ropa únicamente para dormir, cambiarnos de ropa y lavarla correctamente, limpiar los zapatos, lavarnos los dientes…
Dentro y fuera de casa, la limpieza y desinfección son esenciales y están relacionadas con nuestra salud en tanto en cuanto pueden suponer la diferencia entre una mayor seguridad o un mayor riesgo sanitario. Es por ello que este año hemos hecho mayor hincapié en la limpieza y desinfección de las calles, lugares públicos, cercanías de hospitales, centros de salud, farmacias, supermercados, etc.
En casa, hemos instalado nuevos hábitos para prevenir, como la desinfección de la compra o dejar los zapatos a la entrada de nuestros hogares. Una limpieza frecuente y adecuada es positiva por múltiples razones:
✅Promueve el bienestar mental al encontrarnos en un lugar aseado que nos proporciona tranquilidad. Nuestra salud mental se verá beneficiada en espacios donde reine la armonía y evitará el estrés.
✅Previene las alergias: una buena rutina de limpieza ayuda a evadir el polvo y las bacterias, que causan patologías como la popular alergia a los ácaros del polvo, que puede causar la aparición de asma.
✅Evita la aparición de animales como insectos, ratas, cucarachas, etc. Estos animales se ven atraídos por espacios sucios, por ejemplo, si tienen restos de comida. Otro ejemplo serían las chinches, que acuden a nuestras camas si no cambiamos frecuentemente las sábanas y aireamos para evitar crear un espacio digno de un caldo de cultivo.
✅Los espacios húmedos e insalubres atraen a los hongos en zonas como el baño, la cocina y el váter.
✅La limpieza contribuye al ejercicio que realizamos diariamente, puede contribuir a reducir las cargas emocionales y a mantener nuestro cuerpo activo fácilmente.
Este 7 de abril, Día Mundial de la Salud, recuerda lo privilegiados que somos de contar con sistemas públicos de salud y limpieza para contribuir a nuestra calidad de vida. La salud empieza en nosotros y se apoya en la sociedad.