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Es inevitable consumir servicios y bienes en nuestro día a día. Muchas veces generamos deshechos innecesarios en exceso. Esto puede interpretarse como consumismo y contribuye a generar emisiones de efecto invernadero.
Plásticos: #1 de los residuos
Lo que más consumimos son plásticos. El plástico en gran parte es un generador altamente contaminante.
Todo comienza con la extracción de los recursos, su paso por la fabricación, el transporte y hasta llegar a su destino final. Cuando termina su “proceso de vida”, los plásticos emiten etileno y metano, debido a la exposición que tienen al contacto con el sol, aire y agua.
La mayoría de los plásticos terminan en nuestros océanos y afectan a miles de especies, incluidos nosotros debido a los microplásticos. Por ello, hay que depositarlos correctamente en el contenedor amarillo si son envases o donde corresponda.
Otros residuos preocupantes
No únicamente los plásticos son los causantes de ello. Los productos de origen animal (al explotar espacios de naturales para expandir la ganadería), el consumir especies marinas (una industria muy explotada), los deshechos que produce la industria tecnológica y el impacto que tiene la industria textil, son algunos factores que afectan directamente.
Industrial textil: protagonista este año
Cada año se celebra la Semana Europea para la Reducción de Residuos, celebrada desde el 2009. Este año tendrá lugar del 19 al 27 de noviembre y tendrá como temática “Textiles Circulares y Sostenibles”. Y busca proponer soluciones para este tipo de problemática.
La producción de ropa y calzado genera al menos un 8% de las emisiones de gases de efecto invernadero y sobre todo, la industria textil es de las más contaminantes.
Además, ahora compramos más productos y las conservamos la mitad del tiempo (moda rápida o fast fashion) generando más residuos textiles que antes.
¿Qué podemos hacer para disminuir el consumismo?
Una buena idea es apoyar a comercios locales, intentar comprar en tienda física y llevar tu propia bolsa. Así evitamos las cajas de los pedidos online y comprar nuevas bolsas.
Además, recuerda que el producto más sostenible es el que ya está producido. Comprar de segunda mano o aprovechar lo que tenemos por casa para un nuevo uso es muy recomendable también.
Juntos podemos mejorar y reducir los niveles de emisiones de efecto invernadero de nuestro planeta. ¡Evitemos el consumismo y colabora reciclando!
