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Aunque los hábitos y costumbres que teníamos anteriormente en la oficina hayan cambiado sustancialmente tras la pandemia, debemos seguir cuidando y cultivando nuestro lado más ecofriendly. Con las oficinas más sostenibles pensamos en el bienestar de las generaciones presentes y, sobre todo, por el de las futuras que están por venir.
Te contamos varios tips que deberás tener en cuenta si quieres contar con oficinas más sostenibles siguiendo la regla de las tres erres (reducir, reciclar y reutilizar).
Evita en la medida de lo posible el uso del coche o moto. Todos hemos sufrido en alguna ocasión los interminables atascos que se producen en las horas punta del día. Además de evitar estas temibles situaciones, el uso del transporte público vendría a contribuir en sostenibilidad. Así, la contaminación será muchísimo más baja o incluso nula dependiendo del tipo de medio.
Si esta idea no termina de convencerte, también puedes considerar la opción de otros medios de transporte. Algunos de ellos, como la bicicleta, o más recientemente el patinete eléctrico, cada vez están más integrados en la mayoría de ciudades. En nuestra ciudad, tenemos el ejemplo de los carriles especiales en muchas de sus calles y avenidas.
A pesar de que muchas personas sean proclives a mantener sus documentos en papel, la realidad es que la digitalización no para de crecer en prácticamente todos los aspectos de nuestro día a día.
Valorar si realmente es necesaria la impresión del documento en cuestión ayudaría indudablemente a contar con una oficina más sostenible.
En las ocasiones en que la digitalización de archivos no sea viable, usar papel reciclado, reutilizar hojas en desuso o de documentos antiguos. Otro truco sería la impresión a doble cara para aprovechar al máximo el espacio. Recordemos que el uso indiscriminado de papel afecta directamente a los pulmones del planeta.
El aspecto energético puede parecer a priori un aspecto más complicado cuando nos encaminamos hacia una oficina más sostenible. Tenemos una enorme dependencia hacia la tecnología, pero también es posible.
En casi cualquier empleo, vamos a tener que utilizar pantallas (teléfonos, ordenadores…) que consumen muchísima energía para su funcionamiento. El gesto de apagar el dispositivo a la hora de comer o cuando estemos en una reunión o similar, pueden ayudar a disminuir el gasto energético.
En términos de eficiencia energética, el uso de bombillas LED aportan mucha más duración y mucho menos gasto de energía que las convencionales. Ir sustituyéndolas poco a poco en nuestro espacio de trabajo sería un gesto importante. Podemos aplicarlo no sólo en cuanto a sostenibilidad, sino también por nuestro bolsillo.
En las oficinas donde sea posible, el máximo aprovechamiento de la luz natural sería otro aspecto relevante. Además del innegable ahorro energético y económico, podríamos experimentar los múltiples beneficios que aporta, ya que reduce la tensión ocular y la irritabilidad de las personas. Consecuentemente, hay menos probabilidad de sufrir ansiedad, estrés o depresión. Es un punto a favor para nuestra salud física y mental.
En estos tiempos de pandemia, con la ventilación obligada de los espacios cerrados, el invierno puede ser duro debido a las bajas temperaturas que se registran en algunas zonas. El uso de aparatos eléctricos como calefactores, radiadores y aparatos de aire acondicionado son indispensables en cualquier oficina.
Con el objetivo de caminar hacia un espacio más sostenible, una de las propuestas podría ser su uso en dos o tres períodos fijos a lo largo del día y durante un tiempo limitado. Se podrían repartir en varios tramos, y de esta manera nos podría ser mucho más fácil controlar el gasto y el uso que hacemos de este aparato que, por sí mismo, tiene un alto consumo energético.
Es de suma importancia respetar qué se puede depositar y qué no en los diferentes contenedores , ya que cada color posee un significado diferente.
Colocar diferentes papeleras en la entrada de la oficina o repartida por el espacio y formar a los trabajadores en educación medioambiental es un paso obligado para conseguir nuestro objetivo.
A la hora de reponer dispositivos electrónicos o cambio de mobiliario, recuerda consultar qué hacer con cada tipo de residuo. Si necesitas ayuda, cuéntaselo a Limasín, nuestro asistente virtual.
Todos estos cambios se pueden trasladar a cualquier aspecto, situación y contexto de tu día a día. Recuerda que el verdadero cambio está en esos pequeños gestos que hacemos poco a poco.
