Lo último sobre la limpieza de Málaga
El medio ambiente, entendido por el entorno en el que vivimos y convivimos, es diariamente castigado, en mayor medida, por la actividad del ser humano.
Aumentos de las temperaturas, deforestaciones, consumo de ciertos alimentos, uso excesivo de vehículos privados… son, entre otras, acciones que realizamos o provocamos en nuestro día a día.
Todas estas acciones tienen posibilidad de revertirse o minimizarse y, para eso, disponemos de una herramienta al alcance de todos: el reciclaje.
El reciclaje de vidrio puede ser uno de los actos más sencillos y con mayores ventajas para el medio ambiente.
Pese a que no sea un material altamente contaminante debido a su origen natural (sílice), es importante reciclarlo y reutilizarlo para minimizar el impacto al medio ambiente que se produce al fabricar nuevos envases.
El proceso de reciclaje se basa en extraer esa materia prima de los envases ya utilizados para no explotarlos del entorno natural y lucrarse de una de las ventajas más importantes del vidrio: su infinita reutilización.
Se podría definir en una frase, de forma general, el beneficio general del reciclaje de vidrio: “el cuidado del medio ambiente y la colaboración en la lucha contra el cambio climático”.
Aún así, podemos citar beneficios concretos como:
¿Os imagináis una comunidad donde se recicle el 100% del vidrio que se consume?, sería increíble, ¿verdad?
“Yo soy Reverde”, campaña promovida por Ecovidrio, persigue este gran objetivo. Este movimiento por el reciclaje motiva al pueblo andaluz a pasar, en cuanto a reciclaje de vidrio, de unos datos muy buenos a unos datos excelentes.
Además, no te pierdas la entrevista que le hicieron desde Ecovidrio a nuestro compañero Cristóbal Muriano.
Desde Limpieza de Málaga queremos recordar que el reciclaje de vidrio es esencial para el medio ambiente y motivamos a nuestra comunidad autónoma y, especialmente, a los malagueños, a unirnos al movimiento Reverde, para poner a Andalucía en la cabeza de la lucha por el cambio climático. ¡Por nosotros, andaluces!