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No más plásticos de un solo uso

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No más plásticos de un solo uso
13 noviembre 2020 -

La desaparición progresiva del plástico de un solo uso y el auge de sus alternativas

Nuestros residuos plásticos, entre ellos con mayor medida los plásticos de un sólo uso, son desechados pero vuelven a nuestro organismo como parte de la contaminación medioambiental. Según un estudio de la WWF, consumimos alrededor de 21 gramos de plástico al mes mediante los alimentos y el agua. De hecho, el 90% del agua embotellada y más del 80% del agua del grifo tiene diminutas partículas de plástico.

Por ello la Comisión Europea propone para 2021 prohibir los plásticos de un solo uso como: platos y cubiertos, vasos, palitos para sujetar globos, bastoncillos, así como poliespán y otros.

Debemos cambiar este ritmo de contaminación y falta de reciclaje, tan sólo un 30% de los residuos plásticos son reciclados.

Cada pequeño gesto cuenta

Es tan sencillo incluir en nuestro día a día pequeños cambios en el uso de envases y productos plásticos. ¿Sabías que desechamos al mar 8 millones de toneladas de plástico? Esta cantidad supone que, para 2050, habría menos peces que plásticos en el fondo marino.

Las regulaciones europeas están haciendo frente a estas cifras y cada vez más podemos ver como el ecodiseño de los productos se instala en nuestro entorno. Simplemente, tenemos que hacer uso de estos nuevos avances y ver como estilo retro los antiguos plásticos de un solo uso.

¿Qué alternativas al plástico de un solo uso podemos adquirir?
  • Pajitas reutilizables o biodegradables: ¡hay de todos los tipos y para todos los gustos! Podemos ver pajitas de hueso de aguacate, de acero inoxidable, de cartón y hasta comestibles entre otras muchas.
  • Botellas reutilizables: retirar las botellas de plástico de nuestro hogar y empezar a usar botellas de acero o cristal ya es un cambio notable.

  • Productos de baño con envases biodegradables: opta por marcas que proporcionen envases y formatos sin plástico en champú, gel o jabón.

  • Bolsas y envoltorios alimenticios reutilizables y sin plásticos: ¿sabías que existen materiales creados con cera de abejas o fécula de patata para conservar y transportar alimentos?

  • Cepillos de dientes de madera o bambú: la higiene personal también puede ser sostenible.

Súmate al ahorro también

Efectivamente a la larga nuestras cuentas bancarias lo notarán. Los plásticos perecederos son baratos pero compramos en mayor cantidad. Al final, esto supone más gasto que la compra de productos perdurables.

Si quieres saber que ocurre con tus envases y productos de plástico reciclados, revisa nuestra información ambiental proporcionada por el Centro Ambiental de Málaga.