Lo último sobre la limpieza de Málaga
¿Sabes que pronto llegará a la ciudad un nuevo contenedor marrón? Este nuevo contenedor surge como la división del gris, con la diferencia de que todos los desperdicios que se pueden depositar en él son biorresiduos que se transforman en compost, fertilizantes o como generadores de energía.
Los primeros contenedores marrones en Málaga comenzarán a funcionar próximamente a modo de prueba antes de su expansión progresiva por el resto de la ciudad. Y deberán implantarse paulatinamente en toda España antes de enero de 2024.
Los residuos que deben depositarse en el nuevo contenedor marrón son todos los residuos orgánicos, los desperdicios que tardan un menor tiempo en descomponerse: restos de comida, plantas, cáscaras de huevo, posos, servilletas y papel de cocina usados, etc. Los errores más comunes que se pueden cometer y debes evitar son arrojar desperdicios no orgánicos, como: pelo, arena de mascotas, toallitas húmedas, chicles, colillas…
Una vez separados los residuos orgánicos se transportan hacia la zona de fermentación. En esta etapa, los residuos experimentan un aumento de la temperatura, con la presencia de microorganismos mesófilos (65-70°C aproximadamente), eliminando los gérmenes patógenos, semillas de malas hierbas, etc.
Con la fermentación de estos residuos orgánicos se genera el biogás, que es extraído con una amplia red de tuberías hasta llegar a las plantas de desgasificación y producción de energía. En la fase de maduración, la temperatura comienza a descender hasta llegar a la temperatura ambiente. El resultado es unos residuos secos que pueden ser empleados como compost y fertilizantes. Este proceso de reciclaje reduce los residuos en los vertederos, los malos olores y ahorra energía, ya que con la fermentación puede producirse de forma sostenible.
En casa también se pueden reutilizar algunos residuos orgánicos para crear fertilizantes naturales para las plantas. Solo se necesitaría triturar, con un vaso de agua, los posos del café junto con unas cáscaras de plátano y huevo. La pasta resultante debe vertirse sobre la tierra de las plantas.
Beneficios:
Todos estos residuos son fertilizantes orgánicos y ecológicos que reducirán los desechos generados en casa.