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Gracias a la utilización de materiales de calidad que mantienen una temperatura ideal en la vivienda, se consigue reducir de manera radical la necesidad de tener que hacer uso de la calefacción o el aire acondicionado.
Breve historia de las casas pasivas
Las casas pasivas tienen su origen en 1988. Durante un viaje a la Universidad de Lund (Suecia) dos físicos, Wolfgang Feist y Bo Adamson, llevaron a cabo el proyecto de un edificio que no necesitaba calefacción para mantener una temperatura adecuada. De esta idea surgió el concepto de PassivHaus.
W. Feist desarrolló a finales de 1990, la primera casa pasiva en Alemania. En 1996 se inauguró el Passive House Institute, una institución que fijó los parámetros de calidad y una red de profesionales de la construcción. Desde entonces, son miles de casas pasivas las que se han construido en todo el mundo.
Características de este tipo de vivienda
Según el Instituto de Casas Pasivas, estos edificios pueden reducir el uso del aire acondicionado y la calefacción en un 90%. Para ello, deben cumplir estos criterios:
Una casa pasiva eficiente debe estar sellada con materiales de calidad para impedir la infiltración de aire exterior. Además, se debe instalar un sistema sostenible para regular la temperatura de la vivienda.
Estas viviendas aprovechan al máximo el calor generado por el sol. Además, su diseño retiene el calor radiado por las estufas u otros aparatos electrónicos como el horno.
Por otro lado, para mantener la calidad del aire se utiliza un determinado sistema de circulación del aire/calor. Estos ventiladores, si se emplean correctamente, reducen el exceso de CO2 en el ambiente.
Materiales de las casas pasivas
La ubicación geográfica es uno de los factores clave para la elección de los materiales en la construcción de las casas pasivas. Por ejemplo, en ciudades con cambios de temperatura muy extremos, se aconseja el empleo de ladrillo u hormigón ya que responden mejor a estos cambios que la madera.
Las puertas y ventanas de la vivienda deben ser de alta calidad ya que son clave para el ahorro energético y la recuperación del calor. Los paneles solares, las placas aislantes y la iluminación LED son algunos materiales que caracterizan las casas pasivas, aunque se requieren conocimientos específicos para garantizar el éxito en la construcción de estas viviendas.
Desde Limpieza de Málaga, te recomendamos el siguiente post donde hablamos de materiales sostenibles en la construcción.
Como hemos visto, las casas las pasivas aportan múltiples beneficios económicos, sociales y sobre todo medioambientales por lo que seguramente en Málaga sea un tipo de vivienda cada vez más extendida con el fin de convertir en nuestra ciudad en un lugar más sostenible.
Y recuerda que en nuestra web puedes encontrar muchas herramientas para ser más sostenible.
